terapia cognitivo-conductual grupal para jóvenes El trastorno obsesivo compulsivo es un trastorno mental debilitante, que afecta a entre el 1 y 2% de los niños y adolescentes. Los tratamientos actuales basados en la evidencia proporcionan buenas tasas de remisión de los síntomas, pero en un importante porcentaje de jóvenes no se consigue remitir todos los síntomas.

En un reciente artículo publicado en la revista Psychiatry Research, se exploró cuales eran los mejores predictores de la respuesta al tratamiento, en un grupo de 43 jóvenes que recibieron terapia cognitivo-conductual para el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).

Se encontró que cuando en la línea de base, antes de iniciar la terapia, se registraban altos niveles de depresión y de rechazo parental, posteriormente, en la evaluación post-tratamiento, se encontraban niveles más elevados de síntomas del TOC; es decir, la eficacia de la terapia era menor.

Portada revista Psychitry Research.

Psychiatry Research

La acomodación familiar, es una de las variables más estudiadas a la hora de tratar de explicar el desarrollo y mantenimiento del TOC. Se define  como la tendencia de los familiares a responder a los rituales compulsivos del paciente, proporcionándole seguridad, asistencia o participando activamente en la ejecución de dichos rituales, facilitando la evitación de las situaciones que le generan ansiedad, realizando tareas que realmente son responsabilidad del paciente o modificando las costumbres y hábitos familiares para acomodarlos a sus rituales. En este trabajo, la acomodación familiar se asoció con una mayor severidad de los síntomas del TOC en el seguimiento realizado a los 12 meses.

Se encontró también que los jóvenes que fueron clasificados como respondientes al tratamiento en el seguimiento realizado a los 12 meses, presentaban menos síntomas depresivos, que aquellos que eran clasificados como no respondientes en el seguimiento a los 12 meses.

Estos resultados indican que el nivel de depresión al comienzo de la terapia y otros factores familiares, propician una peor respuesta al tratamiento en jóvenes con TOC. Por tanto, los tratamientos deberían refinarse para ajustarse mejor a las necesidades de los jóvenes.

Artículo original:

Lavell, C.H: Farrell, L.J; Waters, A.M. & Cadman, J. (2016). Predictors of treatment response to group cognitive behavioural therapy for pediatric obsessive-compulsive disorder. Psychiatry Research, 245, 186-193.

Publicado en Noticias de psicología clínica